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Teach Me Bajifuyu

El lunes siguiente se presentó en la policía para aclarar su situación. Solo le dijeron que buscará un buen abogado y asistiera al juicio. No fueron de mucha ayuda.

No sabía lo que podía llegar a pasarle si las cosas no salían bien, ¿lo meterían en la cárcel, tendría que hacer servicios comunitarios, pagar?

Menudo problema. Si Baji estuviese ahí sabría que hacer. No podía ser positivo en estos momentos, no tenia ninguna prueba de que no había hecho nada.

El tema de conseguir abogado era otro problema, nunca había tenido problemas con la justicia y no sabia como llevar estos temas. Tampoco conocía a nadie que fuera abogado o que supiera de esas cosas.

Sus compañeros del trabajo notaron que algo había pasado.

-Chifuyu ¿estás bien?

-Tengo un  problema gordo...

-¿Qué paso?

-¿Te acuerdas de la salida de la otra semana?

-Si, claro

-Pues por lo que pasó con Sara... resulta que me denuncio por acoso sexual

-¿Qué dices?

-Si...

-¿Qué vas a hacer?

-Tengo que ir a juicio es dos semanas...

-Eso es injusto. ¡No le hiciste nada!

-Pero no hay nada que pueda hacer...

-Seguro que ganas, ya veras

-No estoy tan seguro... no tengo pruebas a mi favor, ni abogado...

-Tengo el bufete de unos abogados, son buenos, es caro pero merece la pena. Esta tarde te paso el número

-Muchas gracias, estoy un poco estresado con todo esto y puff...

-Tranquilo, tus amigos estamos aquí para ayudarte

-Gracias, de verdad

Llamó al abogado que le paso el numero su compañero. Era caro pero, lo bueno era que si ganaban a esa madre tendría que pagar los gastos. Sino seria él el que le pagaría todo.

Todo estaba colgando de un hilo muy fino. No tenia nada a su favor, esa situación no tenía sentido...

[...]

Llegó el día del juicio.

Se puso el único traje que tenia para causar buena impresión, le quedaba ligeramente apretado, tenia que reconocer que se había abandona un poco en este tiempo, y el estrés no ayudaba.

No le quedaban uñas que morder y empezó a morderse el labio compulsivamente. Su abogado trataba de tranquilizarlo

La tensión le estaba matando, tenia miedo de acabar en la cárcel, Chifuyu no podía pensar en positivo.

Ya se encontraban todos sentados en la sala del juicio. Chifuyu notaba que hacía demasiado calor, los nervios le hacían sudar mucho. Sara le miraba con los ojos entrecerrados desde el otro lado de la sala.

Llegó el juez y comenzó la batalla. El abogado de la mujer expuso a Chifuyu de que le había atacado en varias ocasiones y el juez invito a Sara a subir y contar su historia.

-La primera vez que fui a su despachos -lloriqueo - él me llamo diciéndome que quería hablar sobre mi hija... después me dijo que era muy guapa... y que... lo siento...

-Continúe -dijo el juez

-Me agarro y empezó a tocarme... yo le dije que no... pero me agarro más fuerte y entonces entro alguien y me apartó...

Chifuyu se quedó boquiabierto, no podía creer que esa mujer fuera tan mentirosa y solo era el principio.

Si el juez le creía ... realmente estaba perdido...

-La segunda vez fue en el bar, yo estaba con mis amigas cuando decidí ir al baño. Y ... en la puerta estaba él, esperándome. Me cogió y me metió por la fuerza y empezó a tocarme, besarme... no puedo... lo siento

Chifuyu estuvo a punto de levantarse para desmentir pero su abogado lo paró.

-Muy bien, señor -le dijo señalando a Chifuyu -le toca

Chifuyu se levanto, fue al estrado más nervioso que antes.

-Cuéntenos su versión, por favor.

-Lo del despacho, en realidad fue ella la que me pidió cita ese día para hablar sobre su hija. Y yo estaba en mi silla, detrás del escritorio, no me moví y nunca le dije nada que no fuese sobre el tema de su hija, pero parecía que ya habíamos acabado la conversación, entonces ella se levanto y vino hacia mi y se subió encima. Yo intente apartarla, pero no quería hacerle daño. Entonces llegó el director y nos vio y ella se fue

-Hay un testigo, ¿no?

-Si

-¿Se encuentra en la sala el testigo?

-Si, el director del colegio en el que trabajo.

-Prosiga

-Hace unas semanas, yo salí de fiesta con mis compañeros del trabajo, bebí un poco de más, pero recuerdo que estaba en el baño y note que me abrazaron desde atrás y comenzaron a tocarme... yo no estaba bien y pensé que era otra persona... y le seguí el juego, nos besamos y continuamos un rato hasta que volví en mi y me di cuenta de que se trababa de ella y entonces me aparte y me fui de allí.

-¿Usted no la metió a la fuerza en los servicios?

-No señoría, yo estaba haciendo... bueno, tenía ganas de orinar y cuando estaba en ello... ella me cogió por la espalda. Y ... no me di cuenta de quien era hasta un poco después.

-De acuerdo, puede sentarse.

A Chifuyu le temblaron las piernas cuando fue a su sitio al lado de su abogado.

-Lo hiciste bien, tranquilo -le susurro

Ahora el abogado de Sara llamo a sus testigos, eran las amigas que estaban en el bar. Tenían la historia preparada y básicamente lo único que dijeron era que Chifuyu era un pervertido.

El juez solo ponía cara de póker, así que era difícil saber si de verdad se estaba creyendo todo eso o no.

Después de acabar con ese circo, su abogado llamó al director del colegio y conto su parte.

-Así que usted entro sin llamar y vio a la señorita sobre el acusado

-Si

-Bien, puede retirarse

Aún había un rayito de esperanza, puede que al final las cosas saliesen bien.

-¡Espere señor juez! ese señor esta resentido conmigo porque lo rechace una vez, no es una declaración valida -grito Sara

-Señora, no puede hablar si no tiene la palabra. ¿tiene más testigos?

El abogado de Chifuyu llamó a declarar a sus compañeros de trabajo con quienes habían estado en la fiesta.

-Muy bien, ¿eso es todo?

-Si, creo que si, aunque tengo que decir que esto no tiene mucho sentido. ¿Por qué siendo gay iba a atacar a una mujer? si se le diera por acosa a alguien seria algun hombre guapo, como yo.

-¿Ha dicho que el acusado es gay?

-Si, todos lo sabemos

-Señor Matsuno ,¿es cierto? 

-Si...

-Ay... -el juez se llevo los dedos al entrecejo - Señora Sara, este es el tercer juicio que tengo con usted, y es el tercero en el que el acusado es homosexual.

-¡Yo no lo sabia!

-Señorita... no hable si no le doy la palabra... Ay... teniendo en cuenta la historia de los testigos y falta de pruebas, este juicio falla a favor del señor Chifuyu Matsuno y la señorita deberá pagarle la indemnización por los problemas causados - dió un golpe con el mazo y empezó a recoger los papeles de su mesa.

El abogado de Sara respiro profundamente mientras esta rompía varios folios y decía maldiciones sobre él.

Chifuyu se quedó petrificado sobre la mesa mientras su abogado le daba la mano con efusividad. Ya se había solucionado todo, pero Chifuyu aun no se lo creía.

Sus compañeros y el director se acercaron a él para abrazarlo y Chifuyu por fin sonrió en alivio. 

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